Coronando la Butte Montmartre se encuentra el Sacré-Coeur con su
icónica cúpula en forma de bola de helado. La construcción de esta
confección franco-bizantina se inició en la década de 1870 por
iniciativa de la Iglesia Católica para expiar los “crímenes” de la
Comuna. Square Willette, el espacio al pie de la monumental escalera,
lleva el nombre del artista local que acudió el día de la inauguración a
gritar “¡Viva el diablo!”. Hoy en día, la escalera actúa como asiento
improvisado para los visitantes que disfrutan de las vistas de París,
disfrutan de picnics y observan a los artistas callejeros; las
multitudes solo aumentan a medida que cae la noche. También puede
obtener impresionantes vistas desde la parte superior de la cúpula, que
lo lleva casi tan alto como la Torre Eiffel. |
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